Sin duda nos encontramos en un contexto donde la velocidad, la volatilidad y las altas exigencias impactan todo nivel y nicho industrial. Y este impacto se visualiza también en las capacidades y expertise con que deben contar los diferentes profesionales que se suman a la fuerza laboral. Específicamente, en el ámbito tecnológico estamos en un mundo cuya actividad depende cada día de diversas operaciones digitales que a su vez genera la necesidad de contar con más y mejores profesionales para desempeñarse exitosamente en el ámbito tecnológico. Según estimaciones globales en un rango de tiempo desde el 2020 al 2024, el mercado de los profesionales de TI requerirán de 10.5 millones de personas para suplir las demandas de las distintas industrias: banca, retail, negocios digitales, manufactura, consultoría, entre muchas otras.
Puntualmente en ese contexto, nuestro país enfrenta hoy el desafío de disponer de una brecha de más de 5000 profesionales en el ámbito tecnológico, un volumen considerable si contamos que los recién egresados en dichas disciplinas llegan casi al 80% de esa brecha. De manera adicional, se ha constatado también la tendencia de incorporar perfiles digitales a nivel de Trainees que sean capacidad de aprender, aplicar y demostrar conocimientos y capacidades al menor tiempo posible. Dentro de ello, los perfiles más requeridos son desarrolladores de software y a nivel de área de especialidad destacan los especialistas de datos, arquitectura Cloud y Devops.
Según datos de Fundación Chile, para 2050 se levantarán 792.000 puestos de trabajo relacionados con el desarrollo de software, análisis de datos y ciberseguridad, por lo que el rol de las empresas es clave al momento de potenciar los conocimientos en estas áreas.
En ese mismo sentido, otro fenómeno que se ha ido palpando en el mercado es que el número de empresas de servicios informáticos ha crecido 90% y por ello también ha crecido la necesidad de contar con capital humano perteneciendo a la informática. Estas cifras de fundación Chile reflejan una realidad que va a seguir en aumento, de seguro pues estamos en plena transformación digital donde se evidencia la creciente necesidad de contar con profesionales que posean diversas habilidades diferentes como la capacidad para colaborar, la flexibilidad e inteligencia emocional para enfrentar los cambios. Se refiere a destrezas que antes eran valoradas aunque no fundamentales ni excluyentes para adjudicarse una posición. Hace unos 3 o 5 años atrás, el mercado del reclutamiento y selección de profesionales a todo nivel privilegiaba altamente competencias tales como la iniciativa, la proactividad y la excelencia, entre otras. En la actualidad, además de eso, las personas deben manejar escenarios de incertidumbre y tener la capacidad de responder en forma ágil a problemas nuevos y complejos. Hoy en día existe una alta valoración de la capacidad de las personas de tener y demostrar un aprendizaje acelerado que les permita la incorporación de conocimientos en el menor tiempo posible y, en caso necesario, de desechar posteriormente ese conocimiento para poder reemplazarlo por uno nuevo. Estamos la era del “aprender – desaprender – reaprender”.
Finalmente, la tecnología seguirá abriendo oportunidades y desafíos que impactarán en nuevas formas de trabajar y continuará redefiniendo la relación con nuestros lugares de trabajo, donde las grandes tendencias laborales que marcarán pauta son: el trabajo híbrido, la alta valoración a ambientes de trabajo donde la colaboración y complementariedad de capacidades y skills serán esenciales, el impacto de la inteligencia artificial en el empleo exigirá de conocimientos técnicos ad hoc, programas de atracción y retención de talentos tales como salud y bienestar serán cruciales a la hora de capturar y mantener a los “mejores”, diseño organizacional de cargos marcados por sistemas redárquicos más que jerárquicos, estructuras de trabajo flexibles más que procesos estructurados y rígidos definidos, por ejemplo, por una descripción de cargo que eventualmente tenga una obsolescencia que en los tiempos actuales la transforme más en letra muerta que en una herramienta que realmente refleje el alcance y naturaleza de las funciones de un rol, y por sobre todo, la instalación y fortalecimiento de sólidos procesos de gestión de personas para la atracción, desarrollo y retención de los trabajadores en las organizaciones: reclutamiento y selección, e-learning, encuestas de clima y engagement, planes de desarrollo de carrera, entre otros.
En un mercado laboral altamente desafiante para los profesionales de TI y para la industria de los servicios tecnológicos, Konexa brinda interesantes beneficios y espacios para desplegar todas tus capacidades y competencias. ¡Súmate a Nosotros y Transfórmate en un Konexer!